Esta iniciativa surge de una experiencia personal.

Mi mamá se suicidó cuándo yo tenía 5 años, pero fue hasta que cumplí 15 años me di cuenta de esta realidad y fue un proceso bastante doloroso. Sabiendo la realidad sobre mi mamá, aun así seguía diciendo que había fallecido en un accidente de tránsito, yo no entendía porque no podía expulsar de mi cuerpo la verdadera razón de su muerte. Una y otra vez seguía engañándome y engañando a todas las personas que me preguntaban. Fue cuando me di cuenta que el duelo tras un suicidio es un duelo muy diferente a todos, estamos acostumbrados a esconder estas noticias propiciando el estigma social que ya de por si existe en nuestra cultura al ser un tema doloroso.

Descubri que la sanación viene con la aceptación, Si no aceptamos los hechos de tan lamentable situación, entonces, ¿Cómo vamos a esperar un cambio?

Me percate que no estaba sola, que hay miles de personas que esconden esta tragedia y los lleva muchas veces a reprimir los sentimientos, son incontables las familias que quedan en el aire después de escuchar estas noticias.

Nuestro proyecto se basa en lograr sostener a aquellas personas que no saben a quién acudir porque no se permiten hablar en voz alta del suicidio, porque les da pena que los demás se den cuenta, porque no saben cómo van a reaccionar los demás, porque simplemente es más fácil callar y ocultar que hacerle frente a la situación y honrar a quienes ya no están con nosotros.

El nombre Mar y cielo viene del nombre de ella, Marielos: una mujer única y luchadora con miles de cualidades que simplemente tomó la decisión de partir debido a que se encontraba ante situaciones que se salían de su control y estás le generaban gran dolor.

Esperamos honrar a través de esto a todas aquellas personas que han partido y ayudar a quienes quedan con nosotros.

Los invito a que pasen la voz.

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Fer